Espero que en esta temporada de Adviento se encuentren bien y que tanto ustedes como sus seres queridos estén llenos de alegría y anticipación por la celebración del nacimiento de Cristo en Navidad. Cada año, en este tiempo, reflexiono sobre cómo la humildad del nacimiento de Jesús, nacido de María en un pobre establo de Belén, brindó esperanza, sanación y salvación a un mundo sufriente. El misterio de la Encarnación y la obra de la Redención han salvado al mundo y desatado la fuerza más poderosa para el bien en la historia de la humanidad. La Iglesia Católica ha estado en el centro de esta misión.
Animados por la fe y movidos por el Espíritu Santo, los católicos han construido innumerables hospitales, universidades y escuelas para proclamar el Evangelio y servir a personas de todos los niveles socioeconómicos, especialmente a los más necesitados. La lista de santos, desde Santa Teresa de Calcuta hasta el Beato Stanley Rother, está llena de hombres y mujeres que dedicaron sus vidas a ayudar al prójimo. Ellos son maravillosos ejemplos del amor sacrificial al que todos estamos llamados como discípulos.
En la Arquidiócesis de Oklahoma City, la Iglesia está creciendo, gracias a Dios. Esto no es algo común en muchas áreas de los Estados Unidos. El crecimiento y la vitalidad aquí se deben en gran parte a los hombres y mujeres llenos de fe en todo Oklahoma central y occidental, quienes dan generosamente su tiempo, talento y tesoro.
La Navidad llegará pronto, una ocasión para dar a la familia y a los amigos. Mi petición en esta carta es que considere en oración hacer un regalo de fin de año a una de las siguientes áreas importantes de ministerio:
•La Arquidiócesis de Oklahoma City tiene varias colectas anuales que apoyan las necesidades espirituales, educativas y pastorales en todo el centro y oeste de Oklahoma. •La Fundación Católica de Oklahoma (CFO) ofrece fondos patrimoniales y fondos caritativos que fortalecen parroquias, escuelas y ministerios a través de la arquidiócesis. •El Fondo de Oportunidad para Escuelas Católicas (CSOF) provee asistencia de colegiatura para estudiantes de bajos ingresos, asegurando el acceso a una educación de calidad en las 18 escuelas católicas de la arquidiócesis. •El Santuario del Beato Stanley Rother honra la vida y el legado del Beato Stanley Rother al preservar este lugar sagrado de peregrinación y promover su causa de canonización. •Caridades Católicas de la Arquidiócesis de Oklahoma City aporta programas fundamentales para servir a los individuos y familias necesitados en nuestra comunidad.
Su regalo a cualquiera de estas valiosas y nobles causas puede realizarse en línea en archokc.org/end-of-year-giving o escaneando el código QR incluido.
Por favor, tenga la certeza de mi profunda gratitud por su apoyo y de mis oraciones por todas las personas de la arquidiócesis. Que Dios los bendiga y los mantenga siempre en su cuidado lleno de amor.
Muy Reverendo Paul S. Coakley arzobispo de Oklahoma City