En pocas semanas el año 2024 llegará a su fin y nuestras bien planeadas celebraciones navideñas se fusionarán con nuestra espera del año nuevo, que nos ofrece un nuevo comienzo. Pero el 2025 no será solamente cualquier año nuevo, este nuevo año ¡es un año jubilar!
Mientras se acerca el Día de Acción de Gracias, muchos de nosotros recordamos la historia del primer Día de Acción de Gracias en América, cuando los peregrinos y la tribu Wampanoag se sentaron para celebrar un banquete, donde dieron gracias por todo lo que se les había dado y por lo que habían superado el año anterior.
En mis recorridos por la arquidiócesis, tengo la dicha de celebrar la Misa con muchos de nuestros discípulos más jóvenes. Me encanta conocer a estos estudiantes, a lo mejor durante una visita a la escuela o en alguna Confirmación. Estos estudiantes de secundaria y bachillerato me inspiran y me animan, pero sobre todo ¡me dan esperanza!